El Colegio Oficial de Arquitectos de Galicia amenaza con morir.
Lo veo venir, lo presiento.
Y como el niño del Sexto Sentido, sólo de pensarlo me entra un repelús que se me erizan hasta los pelos de las cejas.
La situación es tan complicada que para poder hacer frente a la tremenda deuda en la que se encuentra inmerso, el colegio ha presentado un plan de viabilidad que contempla el cierre de todas las delegaciones, un ERE de 17 puestos de trabajo y la venta de todo su patrimonio inmobiliario (incluida la futura Sede de Ferrol, proyecto Farnsworth al que se dice adiós), argumentando que de no tomarse estas medidas, sería necesario subir la cuota anual de colegiación y el precio del servicio de visado.
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| nota: leer el bocadillo con voz susurrante que el acojone es todavía mayor. |
En la reunión del próximo jueves en Santiago, se vota para aprobar los presupuestos para el año 2013, que recogen de manera indirecta la aprobación de todas estas medidas.
Compartimos la idea defendida desde la Delegación de Vigo de que el cierre de los centros de trabajo en las delegaciones es una decisión sumamente importante que debe ser tratada de manera explícita y refrendada por el voto de todos los colegiados y no de manera indirecta a través de la simple aprobación de unos presupuestos.
Así que ante la reunión del próximo jueves, esta que os escribe, con derecho a voto, no tiene ni repajolera idea de lo que hacer.
O se sube la colegiación, o todo Cristo a la calle.
Es decir, o más pasta, o un colegio sin servicios delegados.
A la mierda con todo, me dan ganas de arrancarme el cerebro, dejar de pensar y enchufarme a la MTV.
Un saludo.
Sra. Farnsworth
